‘Galaicus’ es el nombre elegido por los promotores de la gran producción audiovisual gallega que comenzará a rodarse en el próximo año. El argumento de la historia es consecuencia de una inspiración del actor Rubén Rios y, el resultado, el fruto del interés de Zircocine y Luis Tosar.

Con estos padrinos todo indica que se cumplirá el deseo del actor de que “sea una película grande y vistosa”. La historia de la cinta nos remite a muchos años atrás, en concreto, al origen de la identidad gallega en relación al mundo celta y a su posterior contacto con Roma.

Lejos de imitar a otros filmes ya estrenados y con nombre de gladiadores, ‘Galaicus’ persigue el rigor histórico y la búsqueda del origen de la identidad de Galicia como pueblo diferenciado. Justamente por ese deseo de fidelidad a los hechos, los productores ya establecieron contacto con reputados especialistas, como José María Luzón, para conseguir que el largometraje sea verídico y adquiera la categoría de película histórica.

3,5 millones de presupuesto

De momento, tienen el dinero justo para empezar pero aún queda camino hasta conseguir los 3,5 millones de euros necesarios para empezar el proyecto. Farruco Castromán, el productor, está seguro de lograrlo y no le falta razón al contar con el respaldo unánime de todas las administraciones, que en el caso de Ourense están en manos de los tres partidos parlamentarios.

La comparecencia para la presentación a la prensa, muy estudiada, tuvo lugar en el salón central de exposiciones del Edificio Simeón de Ourense y contó con el alcalde, Francisco Rodríguez, la teniente alcalde, Isabel Pérez y el presidente de la Diputación, José Luis Baltar, y naturalmente con parte del equipo de la película.

Los responsables públicos se mostraron muy satisfechos, especialmente la teniente alcalde y concejala de Cultura, Isabel Pérez, que ve cumplido su deseo de vincular todavía más la ciudad y el cine. También José Luis Baltar que manifestó que “como era un sector estratégico había que agarrarse a el”.

Y esa unanimidad, lejos de descafeinar las declaraciones, permitió escuchar al actor de moda, Luis Tosar, revelar que Galaicus se va a convertir en una especie de ‘Revuelta Irmandiña’ cinematográfica. También Rubén Ríos estaba nervioso y emocionado y no se cree aún que lo que empezó como un corto se convierta en un largometraje que finalmente no va a dirigir pero que ha patentado. Al fondo de la sala, sus padres seguían la presentación.

Los detalles de la película no se le escaparon porque aunque quedan flecos por atar como el nombre del director o las localizaciones exactas prefieren esperar a que todo esté resuelto. De momento, se sabe el nombre de dos de los personajes: Decimus Iunus Brutus y Julio César. También que se va a intentar construir un castro y que las escenas se rodarán en las provincias de Lugo y Ourense.

Aunque todavía falta para que se anuncie el comienzo del rodaje, la maquinaria se ha puesto a funcionar y todo parece indicar que el año que viene será bueno para el audiovisual gallego, como lo fue el pasado y acreditaron los premios Mestre Mateo entregados el domingo en la ciudad de As Burgas.

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